La primera imagen de la Divina Misericordia fue pintada por el pintor Eugeniusz Kazimirowski en su estudio de Vilna, bajo la supervisión y la atenta mirada de Sor Faustina, en 1934. Durante la II guerra mundial se fueron pintando otras imágenes, entre las cuales se encuentra el cuadro pintado por el pintor Adolf Hyły, pintado con la participación del confesor de Sor Faustina, el Padre José Andrasz SJ. Copias y reproducciones de esta segunda imagen de Jesús Misericordioso pintada por el pintor de la capilla del convento de la Congregación de las Hermanas de la Madre de Dios de la Misericordia en Cracovia-Lagiewniki, se extendió rápidamente por todo el mundo. Fue así como con este cuadro se cumplieron las palabras de Jesús: Deseo que esta imagen sea venerada primero en su capilla y en el mundo entero (Diario 47).
A principio de la segunda mitad del siglo XX empezaron a aparecer ciertas resistencias entre los sacerdotes e incluso los obispos, contra la introducción en las iglesias de la imagen de la Divina Misericordia, imagen que se había propagado ya mucho por todas partes. Dichas resistencias se debían al hecho de que la imagen tuviera una procedencia todavía no sometida al debido análisis por parte de la Iglesia, puesto que no se había iniciado aún el proceso de beatificación de santa Faustina Kowalska. Los obispos también se basaron en las instrucciones de la Santa Sede, según las cuales se debía actuar con gran cautela en lo referente a la introducción de nuevas imágenes. Ante esta situación, el Padre Miguel Sopoćko organizó en 1954, siguiendo las indicaciones sugeridas por la Conferencia Episcopal de Polonia, un concurso de pintura para hacer pintar la imagen de Jesús en el momento que se aparece a los Apóstoles en el cenáculo después de su resurrección, que fue cuando instituyó el sacramento de la penitencia. En el concurso participaron tres pintores, y lo ganó la imagen pintada por Ludomir Ślendziński, obra que fue aprobada por la Conferencia Episcopal de Polonia el día 5 de octubre de 1954. Pero a pesar del gran empeño del Padre Miguel Sopoćko para divulgar esta imagen de Jesús Misericordioso pintada por Ślendziński, no consiguió que la imagen se difundiera.
En 1959 se promulgó una Notificación que prohibía la difusión del culto de la Divina Misericordia en las formas transmitidas por Sor Faustina. Este documento dejaba libertad a los sacerdotes para que ellos mismos discernieran con prudencia si retirar la imagen de Jesús Misericordioso de sus iglesias o no. En aquel entonces, muchas de las imágenes que había fueron sacadas de las iglesias, pero seguía habiendo parroquias donde el cuadro de la Divina Misericordia permanecía en el templo, y los fieles seguían rezando ante él con fervor.
Después de la revocación de la Notificación, en 1978, las imágenes de la Divina Misericordia volvieron a colgarse en las iglesias. Hoy en día, ya no hay países en los que no haya esta imagen de Jesús Misericordioso pintado según la visión que tuvo Sor Faustina. Parece pues que se trata de la imagen de Jesucristo más conocida en el mundo entero.
La visión de la imagen
La visión que Sor Faustina tuvo cuando se encontraba en Plock el 22 de febrero de 1931, durante la cual Jesús le encargó que pintara su imagen fue lo que inició la misión de Sor Faustina. Esta visión tuvo lugar un domingo, justo el día en el que la Iglesia celebra la solemnidad de la Cátedra de san Pedro, lo que representa un contexto muy elocuente para la obra que Jesús iniciaba en la Iglesia por mediación de su “Secretaría”. Sor Faustina habló de este acontecimiento primero con su confesor, quien interpretó el pedido de Jesús desde un plano espiritual i le dijo: Pinta la imagen de Dios en tu alma. Pero al retirarse del confesionario el Señor Jesús le dijo: Mi imagen está en tu alma (…) Quiero que esta imagen que pintarás con el pincel, (…) sea bendecida con solemnidad el primer domingo después de la Pascua de Resurrección; ese domingo deber ser la Fiesta de la Misericordia (Diario 49). Desde aquel momento Sor Faustina ya no tuvo duda alguna: Jesús le estaba pidiendo una imagen material, pero se le presentaban un sinfín de dificultades para llevar a cabo aquel encargo, puesto que por un lado, ella misma no era capaz de pintar, y tampoco conocía a nadie que pudiera hacerlo. Así, cuando presentó esta cuestión a la superiora, la Madre Róża Kłobukowska, ésta le pidió alguna señal del cielo para poder confirmar la autenticidad de la aparición. Jesús entonces le dijo: Lo haré conocer a las Superioras a través de las gracias que concederé por medio de esta imagen (Diario 51).
A finales de 1932 años, Sor Faustina se fue de Plock para dirigirse a Varsovia, y la visión de la imagen de Jesús Misericordioso aún no había sido inmortalizada en el lienzo. Jesús entonces insistiendo le dijo: Has de saber que si descuidas la cuestión de pintar esta imagen y de toda la obra de la misericordia, en el día del juicio responderás de un gran numero de almas (Diario 154).
La imagen de Jesús Misericordioso
obra de Eugeniusz Kazimirowski
La primera imagen de Jesús Misericordioso se pintó en Vilna, en junio de 1934. Fue allí donde Sor Faustina se encontró con el Padre Miguel Sopoćko, que como su director espiritual debía ayudarla a llevar a cabo la misión de la Misericordia. Más llevado por la curiosidad de saber cómo sería la imagen – recordaba el padre Sopoćko – que por la fe en la autenticidad de las visiones de Sor Faustina, me propuse proceder para hacer pintar la imagen de Jesús Misericordioso. Así pues, me puse de acuerdo con un artista-pintor que vivía conmigo en la misma casa, Eugenio Kazimierowski, quien, habiéndole pagado un cierto importe, aceptó pintar el cuadro. Luego, la Madre Superiora, permitió a Sor Faustina salir dos veces por semana del convento para ir a encontrarse con el pintor, e indicarle cómo debía ser la imagen. Todo el tiempo durante el cual el pintor estuvo pintando la imagen bajo la supervisión de Sor Faustina fue objeto de una gran discreción por parte de la Congregación, por lo que a Santa Faustina la acompañaba cada vez, en el camino al estudio del artista, la Madre Superiora Irena Krzyżanowska. El trabajo duró varios meses, y una vez terminado (junio de 1934), Sor Faustina no quedó nada satisfecha, y llorando se lamentaba ante Jesús: ¿Quién te pintará tan bello como Tú eres? Como respuesta oyó estas palabras: No en la belleza del color, ni en la del pincel, está la grandeza de esta imagen, sino en Mi gracia (Diario 313).
El cuadro se colocó en un pasillo oscuro junto a la iglesia de san Miguel (en el convento de las Hermanas Bernardina), donde justo entonces el p. Sopocko había sido nombrado rector. Sor Faustina había solicitado al padre que pusiera la imagen en la iglesia a toda costa, pero el padre se resistía. Finalmente, en la Semana Santa de 1935 – escribió el padre Sopoćko en sus memorias – Sor Faustina me dijo que el Señor Jesús insistía en que expusiera la imagen durante tres días en el Santuario de Ostra Brama, donde se iba a celebrar un Tridium (…), que iba a presidir el padre rector del Santuario, el Canónigo Zawadzki, quien me pidió que predicara la homilía. Acepté con la condición de que colocara la imagen de la Misericordia como decoración en la ventana del pórtico, donde tendría una apariencia imponente y efectivamente así fue: llamaba la atención de todos los asistentes, incluso más que la imagen de la Virgen de Ostro Brama.
Fue justamente aquellos días, desde el 26 hasta el 28 de abril de 1935, durante las celebraciones finales del Jubileo de 1900 años de la Redención, que coincidió con la Fiesta de la Misericordia, que la Imagen del Salvador, crucificado y resucitado, fue por primera vez adorada por una multitud de fieles. Esto tuvo lugar en el Santuario de la Virgen de Ostro Brama. En esa celebración participó Sor Faustina, quien después escribió en su Diario: Sucedió que, tal y como el Señor había pedido, el primer acto de veneración a esta imagen por parte del publico [68] tuvo lugar el primer domingo después de Pascua. Durante tres días la imagen estuvo expuesta en publico, y recibió la veneración publica porque había sido colocada en Ostra Brama, en un ventanal, en lo alto, por eso se la veía desde muy lejos. Durante esos tres días en Ostra Brama fue celebrada con solemnidad la clausura del Jubileo de la Redención del Mundo, el 19 centenario de la Pasión del salvador. Ahora veo que la obra de la Redención esta ligada a la obra de la misericordia que reclama el Señor (Diario 89).
Después de la solemnidad, la imagen de Jesús Misericordioso se volvió a colocar en su sitio anterior, en el convento de las Hermanas Bernardinas. Desde allí, el cuadro era tomado para ser llevado en uno de los pasos de la procesión del Corpus Christi. El día 4 de abril de 1937, tras el dictamen favorable de los expertos de la comisión que había sido convocada, y con el permiso del arzobispo metropolitano de Vilna Romuald Jałbrzykowski, la imagen de Jesús Misericordioso fue bendecida y colocada en la iglesia de San Miguel en Vilna, donde se le rindió culto hasta el año 1948.
Las primeras reproducciones que se imprimieron de la imagen, basadas en una copia del cuadro de Jesús Misericordioso (obra de Lucía Bałzukiewiczówna) fueron hechas en la imprenta de Józef Cebulski, en Cracovia en 1937. Estas imágenes – escribía Sor Faustina al Padre Sopoćko – no son tan bonitas como deberían ser (…). Sin embargo, las compran aquellos que se sienten atraídos por la gracia de Dios, y por lo tanto es Dios mismo quien actúa. Nuestra Congregación ya ha comprado bastantes. La Madre Irena divulga estas estampas y libritos. Hemos hecho el propósito de darlas también en la portería.
Las imágenes de Jesús Misericordioso, obra del pintor Kazimirowski, así como sus reproducciones, se fueron distribuyendo durante la segunda guerra mundial. En Vilna, el fotógrafo Nowicki, bajo pedido del Padre Sopoćko, hizo unas mil copias fotográficas de la imagen de diferentes tamaños (los más pequeños eran de aproximadamente 1 cm). Algunas de estas fotos se cosían en las gorras y uniformes de los soldados. Las estampas imprimidas de Jesús misericordioso eran distribuidas en los conventos de la Congregación de las Hermanas de la Madre de Dios de la Misericordia, también en iglesias, y también se enviaban en paquetes a las cárceles y a los campos de concentración.
En agosto de 1948 las autoridades comunistas hicieron cerrar el convento de las Hermanas Bernardinas en Vilna, por lo que cerraron también la iglesia de San Miguel; por consiguiente, la imagen de Jesús Misericordioso, obra de Kazimirowski, y otros objetos que se encontraban en la iglesia fueron transportados a la iglesia del Espíritu Santo que todavía estaba abierta al público. Allí se colocó el cuadro detrás del altar principal, donde anteriormente se encontraba el coro conventual. Desde allí, con permiso del párroco, Padre Jan Ellert, probablemente en 1949, P. Józef Grasewicz (amigo personal del padre Sopoćko y gran devoto de la Divina Misericordia) tomó la imagen de Jesús Misericordioso para colocarlo en la iglesia en Nowa Ruda (cerca de Grodno), donde él era párroco. La imagen, con la inscripción Jesús en Ti confío añadida, fue colocada en un lugar alto, por encima de la viga que separa el presbiterio de la nave central. Ante la imagen, los habitantes de Nowa Ruda rezaban durante muchos años, incluso cuando las autoridades comunistas cerraron la iglesia, queriéndola convertir en un almacén. En 1970, todos los bienes mobiliarios de la iglesia fueron mudados a la iglesia de la parroquia de Porzecze. Sólo permaneció allí la imagen de Jesús Misericordioso, porque estaba colgado en un lugar demasiado alto, y no había escaleras suficientemente largas para quitarlo. En 1986, se substituyó clandestinamente la imagen por una copia, y la imagen original fue transportada a Vilna. Después de haber llevado a cabo la restauración de la pintura, y de añadir la inscripción pintada y un fondo adecuado en la parte superior del cuadro, en 1987 éste apareció en el altar lateral de la iglesia del Espíritu Santo, recientemente renovada. Más tarde, en 2005, el cuadro fue trasladado a la iglesia de la Santísima Trinidad en Vilna, que fue constituida como Santuario Diocesano de la Divina Misericordia.
La imagen de la Divina Misericordia
obra del pintor Adolf Hyła
en el Santuario de Cracovia-Łagiewniki
La imagen de la Divina Misericordia más famosa de entre todas las que se han pintado es el cuadro pintado por Adolf Hyła, obra que hizo para el santuario en Cracovia-Lagiewniki. El artista pintó la imagen de Jesús Misericordioso, siguiendo la descripción que Sor Faustina dejó en su «Diario» y basándose en la reproducción de la copia de la primera imagen que se hizo, obra del artista Kazimirowski, que le había dado la Superiora del convento de la Congregación de las Hermanas de la Madre de Dios de la Misericordia, la Madre Irena Krzyzanowska. El Padre Andrasz SJ participó también activamente en la creación de esta nueva imagen (director espiritual de Sor Faustina en Cracovia), quien desde 1942 vivía en el convento de Lagiewniki, y muy cerca a la casa del artista.
La primera imagen de la Divina Misericordia, obra de Hyła, fue bendecida por el padre Józef Andrasz SJ, el 7 de marzo de 1943. Como que este cuadro no encajaba en el altar al que iba destinado, donde había sido expuesto para la celebración en honor de la Divina Misericordia, entonces la Superiora del convento, la M. Irena Krzyzanowska le pidió al artista A. Hyła que pintara una segunda imagen, que debería tener el mismo tamaño y forma que la cavidad interior que había encima del altar lateral de la capilla del convento. Al mismo tiempo, la Superiora General de la Congregación de las Hermanas de La Madre de Dios de la Misericordia, la M. Michaela Moraczewska, encargó al pintor de Lwów St. Batowski otro cuadro con la imagen para la capilla del convento. Finalmente, la pintura de Batowski se llevó de Lvov al convento de Cracovia, donde llegó Cracovia-Łagiewniki en el otoño de 1943; pero entonces las hermanas tuvieron un problema, pues no sabían cuál de los cuadros era el que debía colgarse en la capilla. El cardenal Adam Sapieha, que un cierto día fue a Lagiewniki para descansar en el jardín del convento, les echó una mano. Aprovechando aquella ocasión, las hermanas le trajeron a la sala de las visitas las dos imágenes: la de Hyła y la de Batowski. El cardenal, después de escuchar atentamente la historia de ambas imágenes, dijo: Si la imagen de Hyły era su exvoto, que sea ésta la que esté en la capilla, y en lo que se refiere a la imagen Batowski dijo que ya se encargaría él de encontrarle un lugar digno (que finalmente fue la Iglesia de la Divina Misericordia en Cracovia, en Smolensk).
El primer domingo después de Pascua, el 16 de abril de 1944, el padre J. Andrasz SJ bendijo la nueva imagen, que correspondía perfectamente en tamaño y forma a la cavidad del altar lateral. Esta imagen se hizo famosa en poco tiempo, por las numerosas gracias que allí se recibían. Sus copias y reproducciones se vendían en todo el mundo, pues es así como debían cumplirse las palabras del Señor Jesús, cuando le dijo a Sor Faustina, en la primera revelación referente a la imagen: Deseo que esta imagen sea venerada primero en su capilla y en el mundo entero (Diario 47).
En la versión original de la imagen, en el fondo tras la figura del Señor Jesús se veía el paisaje de Lagiewniki pintado, tal como el artista había pintado, pero luego, hizo caso al Padre M. Sopoćko con quien mantenía una cierta correspondencia, y repintó el paisaje, poniendo un pavimento bajo los pies de Cristo y un fondo de color verde oscuro.
La imagen colgaba de la pared del lado derecho de la capilla, pero cuando se celebraba la solemnidad en honor de la Divina Misericordia, todos los terceros domingos de cada mes, se trasladaba la imagen al altar lateral del lado izquierdo, donde había desde los inicios del templo el altar dedicado al Sagrado Corazón de Jesús. En el año 1959, después de la Notificación de la Santa Sede que prohibía la difusión de las formas de culto transmitidas Sor Faustina, cuando de muchas iglesias fueron retiradas las imágenes de Jesús Misericordioso, en la capilla del convento de Lagiewniki, gracias a la decisión del Arzobispo Eugeniusz Baziak, la imagen siguió permaneciendo en el altar.
En algunas publicaciones, se ha escrito que la imagen de la Divina Misericordia fue negativamente evaluada por la Comisión Artística de la Curia de Cracovia, y también algunos dicen que no es fiel a la visión que tuvo Sor Faustina en Plock. En cuanto a la fidelidad se refiere, ésta se puede comprobar fácilmente comparando la imagen con la descripción que hallamos en el «Diario» en el número 47. Por otro lado, en cuanto a la cuestión del punto de vista de las autoridades eclesiales, no encontramos ningún documento que lo certifique, ni en el Archivo de la Curia de Cracovia, ni en los Archivos de la Congregación de las Hermanas de la Madre de Dios de la Misericordia. Al parecer, los autores de esas publicaciones se basan más bien en el protocolo del Consejo Artístico de la Archidiócesis de Cracovia, que evaluó las imágenes del concurso, obras de Antoni Michalak y Tadeusz Okonia respectivamente. En aquella Comisión había también el Padre Miguel Sopoćko, quien se opuso abiertamente a tal interpretación de la imagen de Jesús Misericordioso, tal como la había pintado A. Hyła. El acta del 29 de junio de 1954, en la sección 2 está escrito: la pintura del Sr. Okon es demasiado parecida a las imágenes del Sr. Hyła, cuyo enfoque no había sido aceptado. Justamente esta frase referida a la imagen de Hyła a veces se confunde con la evaluación de la imagen del santuario en Cracovia-Łagiewniki. El Padre Chróściechowski, y más tarde también otros autores citan una frase de alguna carta del P. Sopoćko, en la que se hace referencia a las actas de la Comisión Artística de la Arquidiócesis de Cracovia, con fecha del 29 de junio de 1954, según la cual la Comisión dictaminó que había que dejar de lado la imagen de Hyła, porque reprochaban que dicha imagen pecaba de un cierto feminismo, hecho inaceptable en imágenes destinadas al culto; asimismo, se reprochaba una cierta falta de armonización con la liturgia dominical del Domingo in Albis, día con el cual la imagen debería encajar. La búsqueda de un documento separado que evalúe la imagen de Hyła (del 29 de junio de 1954) en el Archivo de la Curia de Cracovia no dio resultado, por lo que no se ha podido verificar dicha información. Por otra parte, Padre Prof. Adam Bochnak, miembro de la Comisión, durante una conversación con Sor Beata Piekut ZMBM y Sor Elżbieta Siepak ZMBM, afirmó no recordar el hecho de que se hiciera una evaluación independiente de la imagen del Santuario de la Divina Misericordia en Cracovia-Lagiewniki. Por lo tanto podemos concluir que aquella frase de la sentencia del acta de la evaluación de las imágenes de los artistas Michalak y Okon se consideró, al mismo tiempo, como una evaluación de la imagen Hyła.
La imagen de la Divina Misericordia de la capilla del convento del Santuario de Cracovia-Lagiewniki goza de una gran popularidad. Sus copias y reimpresiones se pueden encontrar en todos los rincones del mundo y no sólo en las iglesias, sino también en muchas casas, lugares de trabajo y en general en todas partes donde viven y trabajan los devotos de la Divina Misericordia. Peregrinos de todo el mundo peregrinan al santuario, para pedir ante la imagen de Jesús Misericordioso la misericordia para ellos y para aquellos que se lo piden. Numerosos exvotos colocados en las paredes de la capilla son muestra del cumplimiento de las promesas que Cristo dirigió a aquellos que rezaran con confianza ante esta imagen de la Divina Misericordia. Karol Wojtyla, como sacerdote, condujo celebraciones en honor de la Divina Misericordia, y más tarde, ya como obispo y pastor de la Arquidiócesis de Cracovia. El día 7 de junio de 1997 rezó también ante la imagen, esta vez como el Papa Juan Pablo II. En aquella ocasión dijo: Cada uno puede venir acá, contemplar este cuadro de Jesús misericordioso, su Corazón que irradia gracias, y escuchar en lo más íntimo de su alma lo que oyó la beata. «No tengas miedo de nada. Yo estoy siempre contigo» (Diario, 613). Y, si responde con sinceridad de corazón: « ¡Jesús, confío en ti!», encontrará consuelo en todas sus angustias y en todos sus temores. En este diálogo de abandono se establece entre el hombre y Cristo un vínculo particular, que genera amor. Y «en el amor no hay temor — escribe san Juan —; sino que el amor perfecto expulsa el temor» (1Jn 4, 18).
Ante esta imagen rezó también el Papa Benedicto XVI, el 27 mayo de 2006; también han rezado muchos dignatarios de la iglesia, jefes de Estado, académicos, artistas, personas de diferentes vocaciones y profesiones, e incluso de religiones diferentes. Aquí, ante Jesús Misericordioso – como dicen – no hay división alguna. Aquí sólo cuenta tener un corazón lleno de confianza, con la actitud de ejercer la misericordia al prójimo.
La Imagen de Jesús Misericordioso
obra de Ludomira Ślendziński
Después de la guerra, en los años 50 del siglo XX, la Conferencia Episcopal polaca planteó ciertas reservas en relación con la imagen de Jesús Misericordioso, porque procedía de revelaciones privadas todavía no examinadas por la Iglesia. Por eso, el Episcopado aconsejó tener cierta prudencia en todo lo referente a la imagen de Jesús Misericordioso conforme a la visión de Sor Faustina. Sin embargo, con el fin de dejar una imagen de la Divina Misericordia, pues se veneraba en la Iglesia desde el principio, el Padre Sopoćko, siguiendo las indicaciones sugeridas por la Conferencia Episcopal de Polonia, organizó un concurso de pintura para hacer pintar la imagen de Jesús en el momento que se aparece a los Apóstoles en el cenáculo después de su resurrección, que fue cuando instituyó el sacramento de la penitencia. El padre Sopoćko invitó a participar también en el concurso al pintor Hyla, autor de muchas imágenes de Jesús Misericordioso, incluyendo la imagen milagrosa tan famosa hoy en día que se halla en la capilla de la Congregación de las Hermanas de La Madre de Dios de la Misericordia en Cracovia-Lagiewniki. Sin embargo, Adolfo Hyla se negó a participar en este concurso, porque creía que esto iba a comprometer la causa del culto de la Divina Misericordia. En una carta al Padre M. Sopoćko escribió: esta transacción sería, entre otras cosas, el hecho de componer una imagen de Cristo Misericordioso, a la vez que presenta una escena de su vida tal como se describe en los Evangelios y por otra parte una serie de detalles según la visión de Sor Faustina. Sin embargo, el resultado de esta transacción es una imagen en la que la mencionada escena del Evangelio no se presenta adecuadamente y a su vez destaca el concepto de la Divina Misericordia, fortaleciendo su definición. En efecto, según el Evangelio (Jn 20, 19-24) Jesús después de atravesar las puertas cerradas del Cenáculo, saludó a los discípulos allí reunidos, diciendo: «Paz a vosotros», les mostró las heridas de las manos y del costado, sopló sobre ellos el Espíritu Santo y dijo unas palabras con las que instituyó el sacramento de la penitencia. De todo esto, en la imagen sólo aparece el pavimento y la puerta del cenáculo, no obstante Cristo está haciendo algo diferente: nos muestra los rayos de sangre y agua que brotan de su costado y nos bendice. Al mismo tiempo, esta imagen limita el concepto de la Divina Misericordia, tal como quedó expresado en la visión que tuvo Sor Faustina, puesto que lo entiende estrechamente, comprendiendo la misericordia como algo relacionado sólo con el sacramento de la penitencia.
En el concurso participaron tres pintores, y lo ganó la imagen pintada por Ludomir Ślendziński, obra que fue aprobada por la Conferencia Episcopal de Polonia el día 5 de octubre de 1954, a pesar de las reservas que tenía la Comisión Artística del Episcopado Polaco. Esta imagen (la primera imagen de Ślendziński) se encuentra hoy en día en la capilla de la Esta imagen (la primera imagen Ślendzińskiego) se encuentra en la Congregación de las Hermanas de La Madre de Dios de la Misericordia en Varsovia, barrio de Grochów (en la calle Hetman nº 44).
Hna. M. Elżbieta Siepak ISMM
Traducción del polaco: Xavier Bordas Cornet
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Véase también: Misericordia » Adoración de la Misericordia Divina » Imagen
Misericordia/La historia de la devoción a la Misericordia Divina