La Congregación de las Hermanas de la Madre de Dios de la Misericordia, en la que vivió y murió santa Faustina, fue fundada por la Madre Teresa, cuyo nombre de pila era Eva, de la familia de los príncipes Potocki. Ella procedía de la familia aristocrática de Sułkowski. Después de hacer unas prácticas en la Casa de Misericordia en Laval (Francia), regresó a Polonia y por invitación del arzobispo de Varsovia Zygmunt Szczesny Felinski se puso al cargo, en Varsovia, de la «Casa Refugio» para muchachas caídas moralmente, que precisaban de una reeducación. El 1 de noviembre de 1862, el arzobispo Felinski consagró una capilla y una casa para las muchachas, por lo que este día está considerado como la fecha de fundación de la “Congregación de las Hermanas de la Madre de Dios de la Misericordia”, en Polonia. En las «Casas de la Misericordia» que llevaban las hermanas, encontraban refugio muchachas y mujeres que voluntariamente querían cambiar su vida. En 1878 se produjo la unión con la Congregación de Laval, en Francia, y se logró el decreto de aprobación de la Santa Sede. Desde aquel entonces, la “Congregación de las Hermanas de la Madre de Dios de la Misericordia” funciona en Polonia bajo Derecho Pontificio, y así siguió siendo también despues de independizarse de la Congregación de Laval.
En el período entre las dos guerras mundiales del siglo XX, empezó a haber cada vez más chicas jóvenes (destinadas a las Casas de Misericordia por dictamen del Curador, del Tribunal de Menores o enviadas por personas particulares), para las cuales se iba organizando un sistema educativo-escolar. De ese modo, las «Casas de la Misericordia», que eran un lugar de trabajo y oración, se fueron convirtiendo en instituciones educativas cerradas, es decir, para internas, con un programa de enseñanza en el ámbito de la escuela primaria y de escuelas profesionales secundarias.
En los años de régimen comunista (hasta el año 1962) dichos centros educativos fueron nacionalizados, y al ser absorvidos por el Estado, se conviertieron en centros de «Caritas», en los que las hermanas dedicaban su labor pedagógica a niños discapacitados con necesidades especiales de atención y a mujeres enfermas; también acogían, con su solícita labor, a mujeres abandonadas, y más tarde también empezaron a acoger a madres solteras.
Dios llamó a Sor Faustina Kowalska a esta Congregación, que fue donde el Señor transmitió el mensaje de su Amor Misericordioso para con cada persona, exhortando a proclamar al mundo esta verdad evangélica de la fe. El 25 de agosto de 1995, la Congregación reconoció a santa Faustina como su co-fundadora espiritual. Al adoptar su mision carismática, las hermanas proclaman, hoy en día, el misterio de la Divina Misericordia mediante su testimonio de vida, , en el espíritu de confianza en Dios y de misericordia hacia el prójimo, mediante obras de misericordia, palabras y con la oración. También llevan un Centro Juvenil Educativo y casas para madres solteras, clubes y centros terapéuticos, guarderías, refugios, casas de asistencias social para niños y adultos, casas de retiros; también divulgan el mensaje de la Misericordia en santuarios, parroquias y prisiones; luego, forman a los apóstoles de la Divina Misericordia en el marco de la Asociación internacional “Faustinum”, dan catequiesis en las escuelas, y llevan la editorial “Misericordia”; también redactan la revista trimestral “Orędzie Miłosierdzia” (Mensaje de la Misericordia), cooperan con los medios de comunicación y tratan de hacer presente en el mundo el valor evangélico de la Divina Misericordia y de la misericordia humana.
Hna. Elżbieta Siepak ISMM
Traducción del polaco: Xavier Bordas Cornet